¿Meditar y viajar son incompatibles? ¿Cómo hacer para mantener tu práctica de meditación durante tus viajes o vacaciones?

En BALIBUTA queremos que vivas viajes en conexión y consciencia y una de las maravillosas prácticas que puedes mantener durante tu viaje es meditar. Meditar y viajar te ayudará en mantener la calma, relajarte y conectarte con el momento presente, incluso cuando estás en movimiento.

Hoy, de la mano de nuestra Tour Leader de viajes wellness Caro Baeza de @omdharmayoga, queremos compartir contigo algunos tips que te ayudaran para meditar y viajar:

Encuentra un lugar tranquilo:

Intenta buscar un lugar tranquilo donde poder concentrarte. No tiene por qué ser un lugar alejado de la gente, o sin ruido, pero sí que te sientas cómoda. Puede ser inclusive dentro del medio de transporte en el que te encuentres; un asiento junto a una ventana en un avión, bus o una van, e incluso un rincón con menos tránsito en un aeropuerto o en tu hotel.

Adopta una postura cómoda:

Siéntate con la espalda recta y los pies en el suelo, si es posible. Relaja los hombros y las manos. Si estás en un avión, un bus o en una van, ajusta tu postura de acuerdo a las limitaciones del espacio. Si estás en un lugar donde te puedas sentar en el suelo, hazlo. Cruza tus piernas y apoya tu espalda en una pared.

Enfócate en tu respiración:

La respiración es tu mejor ancla para la meditación y la vida. Respirar correctamente te ayudará, no sólo para meditar y viajar, sino que para la vida en general. Concéntrate en el flujo de la respiración mientras inhalas y exhalas. Observa cómo el aire entra y sale de tu cuerpo, siente la temperatura del aire que ingresa por tus fosas nasales. Si tu mente se distrae, suavemente trae tu atención de vuelta a la respiración.

Observa tus sensaciones:

Presta atención a las sensaciones físicas de tu cuerpo mientras viajas, cómo se siente, qué siente. Nota la presión del asiento, las vibraciones o movimientos del vehículo, y cualquier otra sensación que puedas experimentar. No juzgues ni te apegues a estas sensaciones, simplemente obsérvalas y déjalas pasar.

Sé consciente de tus pensamientos:

Durante el viaje, es probable que surjan pensamientos y preocupaciones en tu mente. No te aferres a ellos ni los juzgues, simplemente obsérvalos como si fueran nubes flotando en el cielo, libera esas nubes y déjalas pasar (despejando el cielo de tu mente). Dirige tu atención nuevamente a tu respiración o a las sensaciones presentes en tu cuerpo.

Además te recomendamos usar algunos recursos adicionales para ayudarte a meditar mientras viajas junto a nosotros. Por ejemplo, puedes escuchar música suave o sonidos de la naturaleza en tus audífonos, aplica aceite esencial de lavanda o tu roll-on de aromaterapia en sienes y muñecas, utiliza aplicaciones de meditación en tu teléfono o sigue guías de meditación online.

Recuerda que la práctica de la meditación es personal y cada uno tiene su propio ritmo. La meditación se practica sin mayores expectativas que darle un descanso al cansancio mental, los estímulos y el sobre pensamiento. Experimenta con diferentes técnicas y encuentra la que mejor se adapte a ti mientras viajas. La clave es mantener una actitud abierta, relajada y receptiva durante el proceso.

Esperamos que estos consejos te ayuden en tu práctica diaria o en tu inicio al mundo de la meditación durante un viaje.

Te invitamos a ser parte de uno de nuestros viajes Wellness, donde podrás comenzar a desarrollar tus prácticas diarias, desconectarte y darle un giro a tu vida. Encuéntralos todos aquí.

Si quieres saber más sobre meditar y viajar o los beneficios que tiene un viaje wellness o de bienestar en tu vida, te invitamos a leer el siguiente artículo: Viajes Wellness, qué son y cuáles son sus beneficios.